Invasion (1969)

1. En 1978, durante la dictadura militar en Argentina,

2. ocho rollos de negativos originales de Invasión, filmada en 1969,

3. fueron robados de los Laboratorios Alex de Buenos Aires.

4. Después de 21 años de bloqueo, el esfuerzo y la amabilidad...

5. de Pierre-André Boutang y otros amigos de Francia y Argentina...

6. permitieron componer una copia negativa completa de la película.

7. La fuente de esta copia fueron cuatro rollos de negativos originales

8. y otros ocho de internegativos...

9. obtenidos de la combinación de dos copias positivas anteriores.

10. Esta es una primera restauración, lograda en 1999...

11. gracias a los técnicos del Laboratorio L.T.C.,

12. a los del Estudio Desmarquest, por el tratamiento del sonido,

13. a Ricardo Aronovich, director de fotografía original,

14. y a Hubert Niogret, que estuvo a cargo de la producción.

15. A todos ellos nuestro agradecimiento. Los autores

16. Le avisaré al café dónde entregar la carga.

17. Para mí, que el domingo ganamos la copa.

18. Como siempre, habrá que jugar contra los jueces.

19. No, nuestros delanteros los arrollarán.

20. El equipo jugará con gran solvencia. Bramante sabe lo que tiene.

21. Correcto. Aquí hay una foto de él.

22. Dichosos los ojos, Porfirio.

23. Es verdad. No sé por qué el lumbago me dedica tanta atención.

24. Porfirio, con su criterio antiguo ¿qué pálpito tiene para el domingo?

25. No sé. El que ustedes quieran.

26. Aquí tiene su hierba. ¿Le cargo un kilo de azúcar?

27. Los amargos lo dejaron alicaído.

28. No se preocupe, Jesús. Me acostumbré a la amargura.

29. Vamos, doctor, a usted le falta fe.

30. Gracias a Dios, en fútbol vamos adelante.

31. Es un consuelo. Ojalá tengan razón.

32. Obviamente la tendremos.

33. Me va a tener que disculpar. Estoy un poco apurado.

34. Wenceslao N., me va a tener que disculpar.

35. Estoy un poco apurado.

36. años sin salir de las vísperas. Ahora ellos están por entrar.

37. - El día es hoy. - Mejor así.

38. Uno se cansa de esperar. Voy para allá, Porfirio.

39. ¿Pasa algo?

40. No tome tan en serio mis ausencias, señora.

41. Le cuento un secreto: a mí me gusta jugar a los misterios.

42. Sí, ya sé que es un juego.

43. Vas a ver que no tardo tanto.

44. Hola.

45. Está bien, Porfirio. Ahí estaré. Quédese tranquilo.

46. Si mi mujer pregunta por mí, dígale que fui a ponerme una inyección.

47. Van a meter un comando en la ciudad.

48. Recibirán las órdenes en este café del puerto.

49. ¿Quieren que los detenga?

50. Allí no vas a poder. No vayas al café.

51. Ve directamente al depósito de vagones. Aquí.

52. En el depósito, los del café se van a juntar con el camión,

53. pero tú vas a estar esperándolos.

54. Acompañado, ¿entiendes?

55. Llévate a Irala y a Silva. Vildrac también va a estar.

56. Yo le avisé a la farmacia.

57. Destruyan el camión. Nada más. Ni seguirlos ni pelear. Nada.

58. Quédese tranquilo, Porfirio.

59. Lebendiger.

60. Herrera, entendiste bien, ¿no?

61. Los esperas en el depósito. No vas al café.

62. ¿No nos dijeron que fuéramos a un depósito en el norte?

63. Sí.

64. ¿Y entonces qué hacemos aquí?

65. Quiero ver si son tan malos como dicen.

66. ¿Por qué tanto lío? Hay que correrlos.

67. Tienes sueño, Dr. Silva. ¿Por qué no duermes un rato?

68. Aquí no va a pasar nada.

69. Y de todos modos, Irala me va a cuidar.

70. ¿No es cierto, Irala?

71. Es verdad. Mejor que duerma un poco.

72. ¿Me permiten un consejo?

73. Los consejos cuestan poco.

74. Bueno. Si no tienen nada que hacer háganlo en otro lugar.

75. Comprendo, Irala. Siempre con dolor de muelas.

76. cuidado con las corrientes de aire.

77. Dos disparos y rápido.

78. Y encima...

79. Usted debe saber dónde está el depósito de vagones.

80. - Puede ser. - ¿Me lo dice?

81. No es tan fácil.

82. Vaya por la frontera norte.

83. Siga el camino de las tropas hasta el segundo cruce.

84. Dobla a la izquierda, dos veces.

85. Después, a la derecha hasta el paredón de ladrillos.

86. - Ahí se complica más. - Si se complica, venga con nosotros.

87. Irala.

88. Pase, a mi lado va a estar cómodo.

89. Es un buen sistema. Llevarlos y que vean.

90. - Para convencerlos de que es cierto. - ¿Y a ustedes les da miedo?

91. Tenemos órdenes de no empezar a movernos todavía, Irene.

92. La trajo usted la orden.

93. Buenas tardes. Soy turista. Turista, del extranjero.

94. Muy interesada en esto, en mi país.

95. - Me dijeron que se puede visitar. - Es cierto como no. Un momento.

96. ¿Tiene miedo, Wenceslao?

97. Tiene razón. Cualquiera tendría miedo.

98. Y el más fácil: miedo a que te peguen y te duela.

99. Ese miedo es capaz de hacerte olvidar todo.

100. Hasta olvidar que los otros están ahí afuera...

101. y que van a entrar,

102. si...

103. nadie...

104. se les anima.

105. ¿Dónde nos trajo, amigo?

106. No sabía que la calle estaba cortada.

107. - Preguntaré el camino a esa tienda. - Acompáñalo.

108. - Hay que golpear más fuerte. - Es cierto.

109. - ¿Dónde estuvo? ¿Y los demás? - ¿Llegó el camión?

110. Porfirio hizo que los troperos lo demoren.

111. Menos mal.

112. Irala se esfumó. Esperaba encontrarlo con usted.

113. El pobre tiene las mejores intenciones.

114. Pero cuando llegue el momento...

115. Esta mañana la vi a Irene en la calle.

116. - ¿Y? - Nada. Eso.

117. - ¿Por qué tardaron tanto? - Se nos cruzó una tropa.

118. - Se hace tarde. - Cuando quieran.

119. Vayan con el auto adelante.

120. ¡Guarda!

121. Preciso esta moto y tú precisas 5000 pesos.

122. Un alquiler. Bájate.

123. No te preocupes; te la va a traer.

124. ¿Y esos qué están haciendo?

125. No se impaciente. Va a volver a sonar.

126. Herrera, ya estuviste tirando tiros por ahí.

127. Sí, sí, me hago cargo.

128. ¿Y? Camiones no será lo único que traen.

129. Vildrac ya me avisó que localizó el camión con la carga.

130. Está en la villa de Los Laureles.

131. Hay que eliminarlo, de cualquier modo, esta misma noche.

132. Ya sabrás por qué, ¿no?

133. Eso. Necesito tiempo, Herrera.

134. Wenceslao N., otra noche en blanco para los dos.

135. Los esperé. ¿Por qué no fueron? ¿Y los otros?

136. No vinieron. No vino nadie. Estaba seguro y se lo dije.

137. ¿Cómo quiere que nos crean? No encontramos a nadie, Irene.

138. Ya basta.

139. Voy a consultar. Regresa.

140. - ¿Quién era ese? - No sé.

141. Me preguntó por una calle.

142. Tomo el autobús.

143. Esta noche no viniste.

144. Estuve ocupado. Pensé que ahora...

145. Se enfermó una amiga.

146. Y como creí que ya no venías...

147. Ayer a la tarde tampoco estabas.

148. Me fui a caminar. No te iba a esperar todo el día.

149. Vuelvo temprano.

150. - Después te veo. - No. Me tengo que ir.

151. - Esta noche hay un... - Bueno.

152. Ahí viene el autobús.

153. Alguien me dijo que, si no nos vamos, nos va a agarrar la lluvia.

154. ¿Qué vamos a hacer? Tiene su gente por todos lados.

155. Rayos, otra vez le mentí a mi mujer.

156. A las mujeres yo les miento cuando les tengo miedo.

157. Cuidado. Me parece que escucho una guitarra.

158. Si la ve Silva, no nos va a perdonar la milonga de ese Flores.

159. - Qué sorpresa. - Pensamos que no vendrías.

160. Nada de suspicacias. Esta noche te seré fiel.

161. La amistad es una pasión mucho más lúcida que el amor.

162. Aquí me tienen.

163. Para los otros, la fiebre...

164. y el sudor de la agonía.

165. Y para mí, cuatro balas...

166. cuando esté clareando el día.

167. Manuel Flores va a morir,

168. eso es moneda corriente.

169. Morir es una costumbre...

170. que sabe tener la gente.

171. Mañana vendrá la bala,

172. y con la bala, el olvido;

173. lo dijo el sabio Merlín:

174. morir es haber nacido.

175. Y sin embargo, me cuesta...

176. decirle adiós a la vida,

177. esa cosa tan de siempre,

178. tan dulce y tan conocida.

179. Miro en el alba mi mano,

180. miro, en la mano, las venas.

181. Con extrañeza las miro,

182. como si fueran ajenas.

183. ¡Cuántas cosas estos ojos...

184. en su camino habrán visto!

185. ¡Quién sabe lo que verán...

186. después que me juzgue Cristo!

187. Para los otros, la fiebre...

188. y el sudor de la agonía.

189. Y para mí, cuatro balas,

190. cuando esté clareando el día.

191. Mi doctor, antes que te emborraches, del todo, ve a vigilar la villa.

192. Gracias. Ahora, que alguien la use de veras.

193. El camión está en la Villa Los Laureles.

194. Hay que destruirlo antes que amanezca, ¿entendido?

195. No es que los otros camiones sean menos importantes.

196. Pero este lleva el equipo de radio que precisan los invasores.

197. Destruirla es demorar el ataque.

198. Y Porfirio necesita tiempo.

199. Además, era mejor darse cuenta de que hoy las cosas cambiaron.

200. Este camión es lo primero que meten en la ciudad.

201. Adivino que se siente sola. ¿Puedo acompañarla con mi silencio?

202. Creo que sí.

203. Bueno, ahora que estamos conversando...

204. le confiaré que yo también frecuento la soledad. Más de...

205. Bueno, vamos.

206. Siempre tan concurrido, Lebendiger.

207. Tómese un descanso. Venga con nosotros.

208. Comprendo su dolor, pero no debe inquietarse.

209. Algo me dice que la volveré a ver.

210. Ya lo sé, Marcelo.

211. Me olvidé el impermeable.

212. ¡Cuidado! Salga. ¿Qué le pasa? ¿Está ciego?

213. ¿Qué le sucedió, Moon?

214. Lleve su auto. Póngalo en punto muerto. Trate de que no lo oigan.

215. No me abrigué lo suficiente. No me conviene tomar frío.

216. ¿Y los otros?

217. El camión está en el parque. Los demás deben estar adentro.

218. Es fácil: alguien tiene que entrar en la casa.

219. Mientras los de adentro se ocupan de él, nos llevamos el camión.

220. - ¿A quién le toca entrar? - El cerco está electrizado.

221. - Tengo herramientas en el auto. - Bien. Vamos.

222. Herrera, para entrar en la casa, estuve pensando.

223. Ya sé quién es el más indicado:

224. yo, precisamente.

225. Si alguien ha de morir el más indicado soy yo.

226. Ustedes pueden ofrecer su valentía; yo solo puedo ofrecer mi muerte.

227. Esta bien, Irala.

228. Terminado.

229. No hay más alambre.

230. Se precisaba un voluntario.

231. Irala acaba de ofrecerse. Me parece bien.

232. ¿Cuánto precisa, ingeniero para poner en marcha el camión?

233. 8 minutos a lo sumo.

234. Cachorro, acompáñalo. Ustedes lo cubren.

235. Silva y yo vamos a sacar el camión.

236. Irala, antes de hacerse oír, Espere los 8 minutos.

237. Tome también el mío.

238. ¡Aquí!

239. ¡Por atrás!

240. - ¿Y ahora qué rumbo? - Al acantilado.

241. No.

242. Lebendiger, que mi mujer crea que esto fue un accidente.

243. No es nada, Julio. Nos vimos en peores.

244. Maneja tú, Cachorro. No sé por qué tengo la vista cansada.

245. ¡Por aquí, vamos!

246. Colóquenlos ahí.

247. ¡No se acerquen tanto, le quitan el aire! ¡Apártense!

248. Ahí hay un auto. Hay que llevarlo al hospital.

249. Quédese tranquila, señora. Nosotros nos ocupamos.

250. ¿Van a intentarlo alguna vez? Hay que hacer las cosas sin apuro.

251. Había que cruzar por el puente, nada más.

252. Ya perdimos contacto con el depósito, y eso gracias a su impaciencia.

253. ¡Será posible! Esto no es un juego. ¡Aquí no hay que demostrar nada!

254. Esa cosa tan de siempre,

255. tan dulce y tan conocida;

256. y con la bala, el olvido;

257. lo dijo el sabio Merlín:

258. morir es haber nacido.

259. ¡Cuántas cosas estos ojos

260. en su camino habrán visto!

261. ¡Quién sabe lo que verán

262. después que me juzgue Cristo!

263. Miro en el alba mi mano,

264. miro en la mano, las venas.

265. Con extrañeza las miro,

266. como si fueran ajenas.

267. A usted ya lo tenemos. ¿Pero a quién obedece?

268. No se haga el que no entiende. Alguien debe pensar por usted.

269. ¿Quién es el jefe? ¿Cuántos son? ¿Dónde están las armas?

270. Ya va a hablar cuando sienta la picana.

271. Aquí no preciso ese aparato. Llévenlo a la otra pieza.

272. ¿Puede dejarnos solos, señora?

273. Perdone. Esto se arreglará entre nosotros dos.

274. Dígame los nombres de su gente. Quiero ver si mi lista es buena.

275. Por lo visto, sabe más que yo.

276. ¿Y las armas?

277. No sé dónde las guardan. Y no se lo diría, si lo supiera.

278. El límite del sufrimiento físico ha sido establecido.

279. No hay razón para llegar tan lejos.

280. Mejor que declare enseguida, ya que tarde o temprano tendrá que hacerlo.

281. De cualquier modo van a matarme. No tengo por qué hablar.

282. Mejor que se rinda, Herrera.

283. ¿Por qué resiste, si la gente espera lo que le vamos a vender?

284. La gente no se da cuenta. Y quienes se dan cuenta tienen miedo, como yo.

285. Voy a sobornarlo:

286. si me da esos nombres, le prometo una muerte rápida.

287. Si no, tendré que resignarme a entregarlo a mis subalternos,

288. que, como habrá visto, no son gente civilizada como nosotros.

289. Discúlpeme un segundo.

290. ¿Qué haría si tuviera el revólver?

291. Lo mataría.

292. Está bien. Es un hombre valiente.

293. Merece que lo mate.

294. No trate de gritar. Es inútil.

295. ¿Por qué me ayuda?

296. Seré anticuada, pero no dejo de reconocer a un caballero.

297. El otro señor falleció.

298. Se lo llevaron. Se fueron todos.

299. ¿Por qué se fueron?

300. Porque el otro señor les dijo dónde están las armas.

301. Les dio trabajo. Lo mataron de una descarga en el oído.

302. Venga para acá. Venga.

303. No pierda tiempo, váyase.

304. ¡Váyase!

305. Necesito gasolina. Voy a tener que cargar.

306. Hágalo.

307. Hoy lo habrán hecho conversar. Estará cansado.

308. Deténgase un momento, por favor.

309. Pobre Silva.

310. Está muerto y no sabe que no les reveló nada.

311. En mi situación hay que mentir a los amigos. También a ti te mentí.

312. Las armas no están en la isla.

313. No sé por qué perdiste tiempo corriendo a ese infeliz.

314. - Pero los aviones... - ¿Y tú creías que no tenían aviones?

315. Moon, Lebendiger y el Cachorro están en la isla.

316. Hay que avisarles que esa gente va para allá.

317. "Uno de los presentes", dijo Morlock, "es el asesino".

318. "Lo supe en cuanto vi que la pipa de ámbar no estaba en su lugar.

319. Además, el perro no había ladrado.

320. Burton palideció.

321. El Doctor Doyle sacó un pañuelo

322. y limpió meticulosamente sus lentes.

323. Morlock seguía jugando con la cucharita del té.

324. Hecha su declaración, parecía, ahora, desentenderse.

325. Al fin, habló."

326. ¡Cachorro!

327. No vamos a saber el final.

328. ¡Cachorro!

329. Y, Miguel, ¿cómo andan las estampillas?

330. Pedime después las que me envió Erika de lslandia.

331. ¿Qué gente hay en la calle? ¿Tienen un depósito? ¿Los viste traer armas?

332. - ¿Armas? Nunca en mi vida. - ¡Mentiroso!

333. ¡Aquí no vive nadie!

334. No nos hagan perder tiempo. Sabemos que aquí se reúne gente.

335. Aquí no vive nadie.

336. Ahí hay otra casa.

337. Duerme. Tengo un día muy ocupado. Después vuelvo.

338. Este carita de ángel quiso hacerse el hombre.

339. La carita no le va a durar mucho.

340. Hay uno detrás de la casa.

341. ¡Tiren las armas! ¡Bajen de a uno!

342. ¡Cachorro!

343. Trae el explosivo. Debe estar por llegar.

344. La están siguiendo.

345. Esta vez te golpearon.

346. ¿Qué quiere decir "esta vez"?

347. Nada. Hablé sin pensar.

348. Julián, no te pido que me cuentes en qué andas,

349. pero sé que son cosas que te importan más que yo.

350. ¿De dónde vienes, Irene?

351. Voy yo.

352. Tengo que ir a un velorio.

353. Pobre Vildrac.

354. Siempre estuvo tan seguro de que no iba a pasarle nada.

355. Porfirio, vine por la costa.

356. Y viste barcos, ¿no?

357. ¡Si viera lo que pasó, Porfirio!

358. Llegaron a la isla esos infelices y tuvimos que meterles fuego.

359. Se quemó todo.

360. - No vino demasiada gente. - Estás pálido, Marcelo.

361. Su mujer preguntó por ti.

362. Laura.

363. Ustedes dos vayan al hotel Unión, en la frontera noroeste.

364. Hablen por Cesáreo, el patrón.

365. Él tiene guardadas las cosas. Mándenlas para aquí.

366. Yo puedo ir.

367. No, tú necesitas un buen descanso.

368. Vuelvan a su casa y no se dejen ver demasiado por la ciudad.

369. Me quedo en casa de Irene. No olvides lo que dijo Porfirio.

370. ¿Qué te pasa, Irene?

371. ¿Ahora no estás feliz?

372. Ahora sí.

373. Algún día, señora, usted será feliz a cada rato.

374. ¿Estás seguro?

375. Tengo que estarlo.

376. Tengo que creer que todo saldrá bien.

377. - Ni me dices de qué estás hablando. - De nada en especial.

378. El día en que podamos vivir como toda la gente.

379. - Ni siquiera me dices dónde vas. - ¡Quedamos en no hablar más de eso!

380. Julián, antes nos contábamos todo.

381. Algo debe habernos cambiado.

382. Pero ¿qué te pasa, Irene? Si todo va bien.

383. Tonta. ¿Por qué lloras?

384. Tengo por qué llorar. Hoy o mañana, da lo mismo.

385. Buenas tardes.

386. Nos dijeron que hace años que usted dirige esta casa.

387. 3 años, 4 meses.

388. Supongo que no precisamos preguntar si tiene vino de Borgoña.

389. Ni yo contestar que no, pero que puedo servirles ajenjo.

390. Bueno, vamos a buscar ese ajenjo.

391. Rayos,

392. ¿cómo habrá hecho Porfirio para juntar todo esto?

393. Tantas armas, y no van a servir para nada.

394. No se preocupe, ingeniero, al viejo no lo van a someter tan fácilmente.

395. Está cargado, Fernando. Usted sabe adónde debe llevar estas verduras.

396. Aquí también están esperando.

397. Ahí los tiene, Moon.

398. Serán unos 10, ¿no?

399. Más de 50.

400. Siempre envidiamos un poco su éxito con las mujeres.

401. Yo mismo estoy perplejo,

402. pero indudablemente en mí hay algo que las atrae.

403. - Acabé por resignarme. - Hay que saber caer en gracia.

404. Claro. Así es.

405. Usted perdonará.

406. Esta casa le queda muy bien. Parece pensada para usted.

407. La verdad es que yo esperaba otra cosa,

408. otra cosa más agradable, pero que hubiera sido una mera repetición.

409. Pero ahora puedo satisfacer una curiosidad que siempre me inquietó:

410. la de saber si soy valiente. Parece que sí.

411. Que no la ofenda lo que dije.

412. Se me ocurre que es una mujer del todo distinta de todas las demás.

413. Qué extraña relación tuve con las mujeres.

414. Me pasé la vida queriendo y engañando.

415. Está bien que haya sido una mujer la que me trajo aquí.

416. Deje que la señorita se vaya, así no ve cosas desagradables.

417. ¿No vio el revólver?

418. No.

419. Yo era ciego.

420. ¡Julián!

421. Irala y Vildrac murieron para que ustedes destruyeran el camión,

422. y fue en vano.

423. Los invasores instalaron una estación emisora en el estadio.

424. Desde ahí van a ordenar el ataque.

425. Ya sé que la cuida un grupo fuerte,

426. pero un hombre como tú, solo, podría destruirla.

427. Eso me daría unos días más.

428. Y los necesito.

429. Quedamos nosotros dos, Porfirio.

430. ¿Para qué seguir peleando?

431. - Siempre vale la pena seguir. - Así será, pero ahora sin mí.

432. La estación está en algún lugar del estadio.

433. Porfirio, yo cumplí siempre lo que usted me mandó,

434. pero esta ciudad no tiene remedio.

435. ¿Para qué morir por gente que no quiere defenderse?

436. Ya no cuente conmigo.

437. La ciudad es más que la gente.

438. Por favor, no me obligue a desobedecerlo.

439. La estación está en algún lugar del estadio, quizá en las tribunas.

440. No voy a ir, Porfirio.

441. Irene, Herrera no irá al estadio. Ya debe estar en tu casa.

442. - Cuando llamamos, nadie contestó. - Debe estar por llegar.

443. ¿Cuánto hace que trabajo para usted? Y usted no me dejó decírselo nunca.

444. Un hombre como él no lo habría aceptado.

445. ¿Por qué no me dejó decirle que yo también era del grupo?

446. ¿Para qué atormentarse cada uno con el peligro que corría el otro?

447. Ya ahora, tú y Herrera podrán hablar.

448. No sé. Debe estar en el estadio.

449. Me aseguró que no iba a ir. Ve a esperarlo a tu casa.

450. Él necesita ser valiente. Iré a mi casa, y él no va a llegar.

451. Llámame en cuanto lo veas.

452. Bueno, vamos.

453. ¿Qué pasa? ¿Quiere hacerse el mártir?

454. ¿Qué? ¿Quién?

455. ¿Y ustedes por qué me llaman?

456. ¿Qué?

457. ¿Dónde?

458. Sí, ya lo suponía.

459. Ya sé que a mí también. Aló. Aló.

460. Parece que cortaron.

461. No te preocupes si no vuelvo. La leche está en la cocina.

462. Ya estoy viejo para estas patriadas.

463. Claro. Sabía que no me fallarías.

464. Parece que a mí no me quieren matar.

465. Deben creer que me quedé solo.

466. Tantos años estuve preparándolos.

467. Ellos ya están adentro. Ahora empieza la resistencia.

468. Ahora les toca a ustedes, los del sur.

469. Ahora nos toca a nosotros, pero tendrá que ser de otra manera.