Benedetta (2021)

1. Te saludo, hermana mía.

2. ¿Quieres cantarle una canción?

3. ¿Quienes son ustedes? ¿Qué están haciendo aquí?

4. Llevamos a nuestra hija al convento para que tome los hábitos.

5. Entonces deben tener escudos, capitán.

6. Para pagar la dote al convento.

7. Lo hago con letras de cambio, nunca con escudos.

8. Deben tener algo bueno para llevarnos.

9. Devuelva ese collar, es de mi madre.

10. ¡Tiene más cojones que tú!

11. La Santa Virgen los castigará si no lo entregan.

12. ¿Qué sabes tú, pequeña?

13. La Santa Virgen hace todo lo que le pido.

14. Que se vaya a hacer dar, la virgen.

15. ¿Oyen? Es la voz de la Virgen.

16. Para mostrarles que me oyó.

17. ¡Mierda!

18. Toma.

19. Contigo se va a divertir mucho, la Santa Virgen.

20. ¡Adelante!

21. Buenos días, señor Carlini.

22. ¿Me hacen el favor de seguirme?

23. Esperen aquí.

24. Las teatinas le agradecen por traer una nueva esposa a Jesús.

25. Benedetta será feliz con nosotras.

26. Traje una buena cantidad de naranjas, manzanas y vino.

27. Durante los próximos 25 años recibirán lo mismo cada año.

28. Es muy generoso de su parte señor Carlini.

29. ¿Y para la dote?

30. Al nacer mi pequeña Benedetta estuvo a punto de morir.

31. Dios la salvó por milagro. Por eso prometí entregarla.

32. Una historia conmovedora. He oído muchas así.

33. Y cada vez me conmueve.

34. Todos los años vemos a cientos de niñas que quieren servir a Dios.

35. Estas son las postulantes de este año y solo puedo tomar a tres.

36. Como sé los desafíos que debe enfrentar soy feliz de donarle 50 escudos de oro.

37. Además de la fruta y el vino que tienen su valor. ¿Cierto?

38. Fuera de aquí la dote de una esposa es al menos de 150 escudos.

39. ¿Una esposa de Cristo vale menos de 100?

40. Hagamos una media, 75.

41. No regatee como un judío por 25 escudos.

42. Es su hija preferida, Giuliano.

43. De acuerdo.

44. 100 escudos.

45. No estamos negociando caballos. Me alcanza su palabra.

46. Y su letra de cambio.

47. Demasiado grande.

48. - Pero son hermosas. - Quítate el vestido.

49. ¿Qué es eso?

50. Era de mi madre. Para rezar a la Santa Virgen.

51. En el convento tenemos a nuestra propia virgen.

52. A partir de hoy le rezarás a ella.

53. - ¡Pero es mía! - Apúrate.

54. El vestido.

55. Me pica, es horrible.

56. Es a propósito, tu peor enemigo es tu cuerpo.

57. No conviene que te sientas muy bien dentro de él.

58. Cuando era un poco mayor que tú...

59. perdí dos pulgadas de carne bajo el cuchillo de un borracho.

60. A este dedo de madera lo quiero más que a los otros nueve.

61. Si pudiera, reemplazaría cada parte de mi cuerpo

62. hasta ser un bloque de madera en el que estaría esculpido el nombre de Dios.

63. ¿Cómo en una lápida?

64. Eres una niña inteligente.

65. Pero ser inteligente puede ser peligroso.

66. Y no solo para los demás.

67. Es por aquí, Benedetta.

68. Dámela.

69. Esta es tu celda.

70. Mañana te pones esto.

71. Amada María.

72. Ahora eres mi madre.

73. Te ruego que me ayudes. Me siento muy sola.

74. Hasta no sé si me puedes oír desde donde estoy.

75. ¡Benedetta!

76. ¿Estás herida?

77. ¡Levanten la estatua!

78. ¿Tocaste la estatua?

79. No, algo se soltó y se cayó sobre mí.

80. ¿Qué hacías aquí?

81. Quería rezarle a la Virgen.

82. ¿Puedes sostenerte de pie?

83. Sí.

84. Es un milagro que no haya sido aplastada.

85. Está bien. Vayan a dormir y lleven a Benedetta a su cama.

86. Ven.

87. Madre.

88. ¿Puede haber sido un verdadero milagro?

89. No exageremos.

90. Los milagros aparecen como hongos

91. pero la mayoría no valen los problemas que traen.

92. No creo que sea uno.

93. 18 años más tarde

94. Deseé tanto ver a mi hijo el Señor Jesús.

95. Deseé tanto estar de nuevo en presencia de su cuerpo.

96. Y Dios, con su misericordia infinita,

97. me envió un ángel que esta noche proclamó:

98. "Subirás hacia tu hijo en la gloria."

99. Para vuestra presencia aquí, hermanos, recé con fervor.

100. Noble señora, llena de gracia y sabiduría, usted es nuestra recompensa.

101. Voy ahora a recostarme en esta cama preparada para mí.

102. ¡Benedetta!

103. ¡Ven!

104. ¡Eres mi esposa! ¡Ven a mí!

105. ¡Ya voy Señor! ¡Ya voy!

106. ¡Ven a mí!

107. ¡Benedetta! ¡Los pies!

108. Este festín es ofrecido por nuestro generoso invitado,

109. Giuliano Carlini.

110. Bebamos a su salud.

111. Pensemos también en nuestro querido obispo de Milán,

112. que se lo llevaron la semana pasada.

113. Oí decir que fue por causa de la peste.

114. Efectivamente.

115. El obispo era una buena persona...

116. pero siempre sospeché que su cátedra lo obnubiló.

117. Si es la voluntad de Dios,

118. el sitio del obispo estará mejor ocupado por vuestra gracia.

119. No, no, y es realmente triste.

120. Hice la corte al Vaticano con la imprudencia de una ramera,

121. pero no soy una personaje lo suficientemente famoso.

122. Ya sería prodigioso que el Papa ubique a Pescia en un mapa.

123. Solo nos queda esperar un milagro cartográfico.

124. ¿Qué hacías con tus pies?

125. Se suponía que estabas muerta.

126. Vi a Jesús.

127. Vino hacia mí.

128. Soy su esposa, ¿no?

129. Sí, por supuesto.

130. ¡Abran la puerta!

131. - Abre. - ¡Me va a matar!

132. ¡Abran, por favor!

133. ¡Tómeme! ¡Ya viene!

134. - Ayúdeme. - ¡Ramera!

135. ¡No te me escaparás! ¡Eres mí, puta!

136. ¡Quiero quedarme con ustedes!

137. ¡Ven!

138. ¿Buscas pelea?

139. ¡Está en un convento!

140. Amo a Jesús, acépteme.

141. Soy el padre de esta chica, me pertenece.

142. Déjeme quedar aquí.

143. Un convento no es un sitio de caridad, querida.

144. Hay que pagar para entrar aquí. ¿Tienes dinero?

145. - No. - ¡Ya basta!

146. ¡No!

147. ¡Suéltame!

148. ¡Quiero servir a Dios!

149. - ¡Madre, ayúdela! - ¡Pagaremos su dote!

150. ¿Quiere que pague la dote de una desconocida?

151. Rezaré toda mi vida por usted, señor.

152. ¡Grandioso!

153. Señor Carlini, los ricos no entran al reino de Dios.

154. Lo dijo Jesús.

155. Y usted, hace todo lo posible para que pueda entrar.

156. Está bien.

157. Es un regalo para ti, Benedetta.

158. ¿Cómo que un regalo? Es mi hija. No la entregaré por nada.

159. Te daré diez dinares, ni uno más.

160. Veinte y los gastos de un perro para reemplazar a esta arrastrada.

161. Así.

162. Es delicioso.

163. Toma.

164. Enjabónate bien.

165. - ¿Cómo te llamas? - Hermana Benedetta, ¿y tú?

166. Bartolomea.

167. - ¿Bartolomea cómo? - Solo Bartolomea.

168. ¿Bañarse es una regla, aquí?

169. Una alma limpia exige un cuerpo limpio.

170. Me froto lo más fuerte que puedo. ¡Mierda! ¿Dónde está el jabón?

171. Casi me caigo.

172. ¿Queda agua para enjuagarme?

173. ¿Hermana Benedetta?

174. Tu camisón está sobre la mesa.

175. ¿Hermana Benedetta?

176. Tengo ganas de cagar. ¿Dónde es?

177. Ven conmigo.

178. - ¿Son verdaderos inodoros? - ¿Dónde lo hacías antes?

179. Afuera con los animales.

180. ¡Ah, qué placer! ¡Qué alivio!

181. ¡No se puede hablar tan fuerte!

182. Espero que esto esté permitido.

183. Espera.

184. ¿Quién te hizo eso?

185. Mi padre.

186. ¿Por qué?

187. Mi madre murió de la peste el año pasado

188. y mi padre me tomó como mujer.

189. Yo le decía que no quería y él me decía que mi opinión no importaba.

190. ¿Cómo mujer quieres decir para todo?

191. Sí, para todo.

192. Mis hermanos me hacían lo mismo cuando el viejo no miraba.

193. Esta mañana intenté impedírselo con una tijeras.

194. No le gustó y me golpeó. Por eso me fugué.

195. No siempre es una ventaja ser bonita.

196. Si me pareciera a una cabra haría lo mismo.

197. ¿Me encuentras bonita?

198. ¿Acaso no lo sabes?

199. No, no teníamos espejos.

200. Eres bonita.

201. Puedes ver tu reflejo en mis ojos.

202. - No veo nada. - Acércate más.

203. ¿Te ves?

204. ¿Qué hacen aquí?

205. No sabía dónde estaban las letrinas.

206. ¿Quién es?

207. Christina, la hija de la reverenda madre.

208. ¿Siempre espía así para su madre?

209. Santa Madre, creo que Bartolomea espera que le dé ejemplo

210. pero no soy digna de instruirla.

211. Dios puso a esta chica en tu camino.

212. ¿No tiene necesidad de amor y de consejos?

213. Sí, pero debe ser dirigida por una mano de hierro

214. que no tengo.

215. Dios te guiará.

216. ¡Auxilio, Jesús!

217. - ¿Qué querían esos animales? - Matarte.

218. Son demonios que intentaban alejarnos a uno del otro.

219. Pero son estúpidos.

220. Ni la vida ni la muerte pueden separarnos.

221. Quédate conmigo.

222. Sí, dulce Jesús.

223. Me quedaré contigo.

224. Hable, hermana.

225. Padre...

226. He visto a Jesús.

227. - ¿En sueños? - No.

228. En carne y huesos. Como lo veo a usted ahora.

229. ¿Qué fue lo que sintió?

230. - Miedo. - Entonces fue una falsa visión.

231. Cuando Cristo se manifiesta uno se siente feliz.

232. ¿Cómo puedo saber lo que es cierto o lo que es falso?

233. A través del sufrimiento.

234. El sufrimiento es la única manera de conocer a Cristo.

235. Sé que Dios quiere que suframos, pero...

236. - me da miedo. - Es normal.

237. Los caminos de Dios a veces son aterradores.

238. Los imbéciles dicen:

239. "No le temo porque sé que es toda bondad."

240. ¿Nunca vieron a un cirujano trabajando?

241. ¿Debemos alegrarnos de nuestras desgracias?

242. Rece para lograrlo.

243. Ego te absolvo.

244. Las bobinas quedaron arruinadas. ¿Sabes cuánto valen?

245. - ¡Idiota! - Tú me atropellaste.

246. ¿Perdón?

247. Fue culpa tuya.

248. No mientas.

249. Fuiste tú, yo te vi.

250. - Saca las bobinas de la caldera. - El agua está hirviendo.

251. Sácalas o te entregamos a tu padre.

252. Ahora las demás.

253. ¿De nuevo?

254. Mientras hablamos las bobinas se echan a perder.

255. - ¡Detente! - ¿Qué es eso?

256. ¿Qué pasa aquí?

257. Bartolomea se quemó la mano.

258. - ¡Todas a trabajar! - Hermana Petra.

259. - Tiene que ir a la enfermería. - Llévenla.

260. Me enteré que una de sus hermanas estropeó unas bobinas de seda

261. y resolvió administrarle un castigo.

262. No, reverenda madre.

263. ¿No?

264. No quise castigarla, quise hacerle daño.

265. ¿Quiso infligirle dolor a una de sus hermanas deliberadamente?

266. Sí, deliberadamente.

267. ¿Fue por malignidad?

268. Si me dice que fue por malignidad sabré que es cierto.

269. ¿No conoce sus propios sentimientos?

270. Parece que no.

271. ¿Bartolomea hizo algo que la enfadó?

272. No.

273. - ¿La detesta por algo? - No.

274. ¿Tiene afecto por ella?

275. Siento... compasión, sí. Por todos sus sufrimientos.

276. ¿Incluido el que le infligió?

277. Sí, el padre Ricordati dice que los sufrimientos nos guían hacia Dios

278. y nos hacen más fuertes.

279. Nuestros propios sufrimientos,

280. no los sufrimientos de los demás.

281. Mostró demasiado celo.

282. No comerá pan por una semana

283. y durante 15 días cambiará las sábanas de la hermana Jacopa.

284. - Puede retirarse. - Bien, reverenda madre.

285. - Hermana, debo ayudarla. - Quédate dónde estás.

286. Sufrir es mi tarea y estoy orgullosa de ello.

287. El orgullo es un pecado mortal.

288. Todos tenemos derecho a un pecado.

289. ¿Cuál es el tuyo?

290. Nunca pequé.

291. - Pero sé que podría. - Por supuesto.

292. Ayúdame.

293. Mi pecado...

294. es haber nacido judía.

295. La hermana Petra era puta.

296. Se vendía en las letrinas de Florencia y a nadie le importa.

297. Pero mi padre era circunciso.

298. Eso es la culpa imperdonable.

299. Acabas de descubrir mi amante secreto.

300. ¿A eso le llama amor?

301. Dios te hablará en muchas lenguas.

302. Si tu corazón es lo suficientemente valiente para abrirse a él.

303. ¡Apártense! Dejen pasar a la abadesa.

304. ¡Tengo mucho dolor!

305. ¡Me están torturando!

306. Sosténgale la pierna. ¡Cuidado!

307. Va a pasar.

308. Átenla.

309. Vayan a buscar a los médicos.

310. ¿Cómo está?

311. Le di jugo de amapola. Ahora duerme.

312. - ¿Qué le pasó? - No encontré nada anormal.

313. - Pero está sufriendo mucho. - Gritó durante horas.

314. Hay bilis negra en la orina. Es bastante frecuente.

315. ¿Y si repite la crisis?

316. Le dejaré jugo de amapola.

317. 20 dinares.

318. ¿Por qué eres tan cruel?

319. ¿Quieres estar conmigo?

320. Yo quiero estar contigo.

321. ¡Jesús!

322. ¡Gracias, dulce Jesús!

323. Benedetta.

324. Voy a curar tu herida.

325. - No es Jesús. - Soy Jesús.

326. Eres mi esposa.

327. ¡No, no es falso!

328. ¡Entrégate a mí!

329. ¡Puta, te voy a cortar en pedazos!

330. Va a tener una compañera de celda.

331. Gracias.

332. Benedetta.

333. ¿Se siente mejor?

334. Me siento como Dios quiere que me sienta.

335. Decidí poner a alguien a su lado. Se quedará día y noche.

336. Cuidará de usted. Rezará con usted.

337. Le dará el remedio si lo necesita.

338. Lamento ser una carga.

339. Veremos si mejora las cosas.

340. Bartolomea fue la única que se ofreció para esta tarea.

341. Espero que haya algo de providencial en esta elección.

342. Una lección de perdón, quizás.

343. ¿Por qué estás aquí?

344. ¿Para atormentarme?

345. ¿Hice algo que te hace pensar eso?

346. ¿Cómo se puede poner algo aquí dentro?

347. Es el vestido que llevaba cuando vine aquí.

348. ¿Y esto?

349. Era de mi madre.

350. Me la dio cuando era pequeña.

351. Entonces la vamos a poner... ahí.

352. Fui abusada por el diablo. Me hizo hacerte daño.

353. Pero volviste.

354. ¿Ya dejaste la cama?

355. Trato de ser útil.

356. La reverenda madre me pidió ayuda con las cuentas.

357. ¿Qué es eso?

358. Números.

359. No los conozco.

360. Podría enseñártelos.

361. No soy fuerte para aprender.

362. Bien caliente.

363. ¿Algo más?

364. No, gracias. Tengo que acostarme.

365. ¿Puedo mirarte?

366. No nos permiten estar desnudas delante de las demás.

367. ¿En serio?

368. ¡Te vi!

369. Era una broma.

370. Eres la única que encuentra graciosas tus bromas.

371. Puede ser.

372. Vi tus senos.

373. Los vi.

374. Benedetta.

375. ¡Benedetta!

376. ¿Quieres sufrir para demostrar tu amor hacia mí?

377. Quítate la ropa.

378. No nos permiten estar desnudas delante de otro.

379. Donde estoy no existe la vergüenza.

380. Haz lo que te digo.

381. Sí, Señor,

382. te obedezco.

383. Ven hacia mí.

384. Quita todo lo que nos separa.

385. Pon tus manos sobre las mías.

386. ¡Qué dolor!

387. ¡Dios mío, qué dolor!

388. ¡Es demasiado! ¡No doy más!

389. Ayúdame.

390. Ayúdame.

391. Ayúdame.

392. Jesús me hizo esto.

393. Anoche...

394. me hizo esto.

395. Y aquí también.

396. ¡Los estigmas!

397. ¿Estaba rezando cuando sucedió?

398. Estaba en la cama, durmiendo. Ahí fue cuando sucedió.

399. San Francisco estaba rezando cuando recibió los estigmas.

400. Catalina de Siena, también.

401. Ninguno de los dos estaba durmiendo.

402. Yo estaba durmiendo.

403. - Y Jesús me hizo estas marcas. - Era Jesús, yo lo vi.

404. ¿Lo viste?

405. Lo oí hablar.

406. ¿Qué dijo?

407. No recuerdo.

408. Creía que la palabra de Dios te habría impresionado mucho más.

409. Lleva a la hermana Benedetta a mi habitación.

410. ¿Puedes abrir?

411. Por más que limpie estas heridas vuelven a sangrar.

412. Son muy profundas.

413. Observe.

414. Los pies están en el mismo estado.

415. - ¿Y el flanco? - Peor.

416. - ¿Cómo es posible? - No lo sé, nunca vi algo así.

417. ¿Qué podemos hacer?

418. Mantenerlas limpias y cambiar los apósitos cada dos horas.

419. Quítale la toca.

420. No hay sangre.

421. Me duele.

422. Cuando le colocaron la corona de espinas,

423. la frente de Jesús sangró.

424. No veo nada.

425. Cubre sus heridas y cierra.

426. ¿Tiene dudas?

427. La chica estaba acostada.

428. Ningún milagro ocurre en una cama.

429. ¿Qué escribo, entonces?

430. La ausencia de signos en la cabeza es desconcertante.

431. En todos los casos confirmados como estigmas se habla de marcas

432. dejados por la corona de espinas.

433. Pero Dios no está obligado por ninguna ley escrita.

434. ¿Estamos de acuerdo?

435. - ¿Vuestra Gracia? - ¿Sí, hija mía?

436. - ¿Puedo retirarme? - Por supuesto.

437. - ¿Le gustaría una copa de vino? - Con mucho gusto.

438. Déjame aquí, necesito rezar.

439. ¿Le parece que me apresuro en creer a este milagro?

440. Mi estimado preboste. Creo que no lo cree de ninguna manera.

441. ¿Soy tan cínico?

442. Quizás, a menos que yo mismo tenga una visión.

443. Es muy posible.

444. ¿Una visión de San Francisco, quizás?

445. Asís era un pueblo insignificante. Hoy afluyen los peregrinos.

446. Y llenan sus dos basílicas.

447. Administradas por un obispo, no por un preboste.

448. ¿Jesús, qué me está sucediendo?

449. ¡Blasfemia!

450. ¡Sepan pecadores,

451. que cuando la peste se abate sobre todo el país

452. Pescia es perdonada por la sola gracia

453. de mi esposa!

454. ¡Acosan, atormentan y persiguen a la que los protegió!

455. - ¿Qué vio? - Se cayó.

456. Un milagro en el momento adecuado.

457. Vuestra Gracia, todo esto ya fue demasiado lejos.

458. - Tenemos... - ¿Quiere atraer los rayos del cielo?

459. ¿Oyó las palabras pronunciadas?

460. - Oí palabras... - ¿Se burla de mí también?

461. Las palabras de esta niña, pese a lo perturbadoras, son de Dios.

462. Lo siento en lo más hondo de mi alma.

463. Este milagro es la gloria de las teatinas. ¿Acaso no lo ve?

464. Lo veo, Vuestra Gracia.

465. Se hace la dócil...

466. pero me apuñalará desde que le dé la espalda.

467. Pues veremos si Dios nos da todo los que deseamos.

468. Bendita seas Benedetta.

469. Santa Benedetta.

470. La gente va a creer verdaderamente que Benedetta es una santa,

471. cuando sabemos que no tiene sentido.

472. ¿En serio?

473. Apenas se extrañó de la falta de heridas en su frente

474. que de golpe rompe un vidrio y aparecen las heridas.

475. ¿La vio? ¿Estaba presente?

476. No...

477. Por lo tanto no sabe nada.

478. No vi nada... pero lo sé.

479. ¿Cómo lo sabe? ¿Se lo mostró Dios?

480. ¿También tuvo una visión?

481. ¿Por qué la defiende?

482. No siempre entendemos los instrumentos de Dios.

483. Quizás puso en transe a Benedetta y fue así que se hirió.

484. O Dios nos envió a una loca...

485. que cuenta tonterías para lograr sus propósitos.

486. Quiero que me des tu corazón.

487. ¿No moriré sin corazón?

488. Vivirás. ¿Me amas?

489. ¿Cómo puedo amarte sin corazón?

490. Te daré uno nuevo. El mío.

491. ¿Bartolomea?

492. - ¿Qué te pasa? - Jesús me dio un nuevo corazón.

493. Es tan grande.

494. Demasiado grande para mi pecho.

495. Siéntelo.

496. Siente lo grande qué es.

497. Sí... lo siento. Sí.

498. - ¿Qué pasa? - Benedetta tuvo una pesadilla.

499. Estoy bien.

500. Buenas noches.

501. Vayan a acostarse.

502. Nos ha sucedido algo maravilloso.

503. Jesucristo ha elegido a nuestra bienaventurada hermana

504. Benedetta.

505. Hemos visto sus heridas.

506. Son las de Jesús.

507. ¡Alabado sea Dios!

508. ¡Alabado sea Dios!

509. Jesús la eligió.

510. Y es por eso que nosotros,

511. investidos por el poder de su iglesia,

512. elegimos a Benedetta como abadesa del convento de las teatinas.

513. In nómine Patris et Fílii et Spíritus Sancti.

514. - Amén. - Amén.

515. Oremus.

516. Señor Dios...

517. No puede ser.

518. Hermana Christina. ¿Qué le ocurre?

519. Con todo el respeto que le debo, padre...

520. somos nosotras...

521. nosotras, las hermanas de este convento,

522. las que elegimos una nueva abadesa.

523. Solo nosotras.

524. Es Jesús que eligió.

525. Vuestro Señor y Amo.

526. Es la voluntad de Dios.

527. ¿Quién decide lo que es voluntad de Dios?

528. ¿No somos nosotras...

529. - las hermanas... - ¡Christina!

530. Retírese.

531. Ahora.

532. Causa finita.

533. Le pido a la reverenda madre que renuncie a sus funciones.

534. Hermana Benedetta,

535. adelántese.

536. - Dilo nuevamente. - Su Majestad.

537. ¡Reboto!

538. - Es mi cama. - Es suave.

539. Solo para nosotras.

540. ¡La hermana Jacopa se cayó! ¡No se puede mover!

541. No creo que pase el día.

542. Reverenda Madre, me quedaré con ella.

543. Por supuesto.

544. Pero si no entrega el alma antes de Vísperas deberá dejarla.

545. Será mi primer oficio divino como abadesa

546. y Jesús me dijo que usted tiene que estar presente.

547. Está bien, reverenda madre.

548. Me quedaré con la hermana Jacopa si es necesario hasta el amanecer.

549. Jesús no dice nada sobre usted.

550. La insultan y no dice nada.

551. Son las reglas del juego. A fin de cuentas todos ganan.

552. El preboste tendrá su obispado y las teatinas sacarán provecho.

553. ¿Es tan importante?

554. Quizás sea vano e inútil pero le dediqué mi vida.

555. Tenía una vida para entregar y elegí este convento y...

556. él me eligió, quizás.

557. Pero madre, no puede... - Llámeme hermana Felicita.

558. Pero la gente tiene que saber. Lo que sucede aquí es una blasfemia.

559. Los que importan ya lo saben.

560. Si no denuncian a Benedetta es porque no quieren que la denuncien.

561. Si llegas a hacerlo te destruirán. Te quedarás sola.

562. Y no te defenderé.

563. Es hora de Vísperas, hermana Felicita.

564. Mentira...

565. Padre.

566. - Quiero confesarme. - ¿A este hora?

567. Es necesario, padre, por favor.

568. Se negó a inclinarse delante de Dios. ¿Está arrepentida?

569. El Señor me enseñó que nunca debo mentir.

570. Es lo que me lleva al arrepentimiento.

571. Hable. Renueve los lazos que la unen con Jesucristo vivo.

572. Es sobre la hermana Benedetta, vine a decirle que..

573. ¿Está hablando de su reverenda madre?

574. Sí.

575. Sí, estoy hablando de la reverenda madre.

576. Es una falsa profeta.

577. Su milagro fue falso. Ella se hizo los estigmas...

578. Está en confesión, hija mía. ¿Vino a acusar a otros?

579. Me acuso de haberme callado.

580. Por cobardía.

581. ¿Tiene pruebas?

582. Los estigmas en su cabeza.

583. Usó un trozo de vidrio para lacerarse la frente y sangrar.

584. ¿Fue testigo de eso?

585. Sí.

586. El tres.

587. ¿Y este?

588. - Cuatro. - Sí, hazlo.

589. No, apoyas demasiado fuerte.

590. Hazlo de nuevo.

591. - No puedo. - Sí.

592. Ven.

593. Ven.

594. ¿Querías verlos?

595. Muéstrame.

596. ¡Entra más!

597. ¡Más adentro!

598. No puedo, mi mano es demasiado grande.

599. ¿Quieres probar?

600. ¡Dios mío!

601. ¡Dios mío!

602. ¡No!

603. ¡No, no, no!

604. - ¡No! - ¡Sí!

605. ¡Goza, ahora!

606. ¡Goza!

607. ¡No se detiene!

608. ¡Dulce Jesús!

609. ¿Quieres otra vez?

610. La lectura de hoy es tomada del Levítico.

611. Pero antes de comenzar...

612. quisiera abordar unas cuestiones que molestan a algunas de las hermanas.

613. Hermana Christina.

614. Hay algo que le preocupa.

615. Tiene el deber de expresarlo.

616. ¿Quiere que hable ahora?

617. - ¿Aquí? - ¿En qué otro lugar?

618. Desahóguese. Levántese y hable.

619. ¡Vamos, hable!

620. Nuestra madre superior...

621. nos engaña y nos miente.

622. Explíquese, querida hermana.

623. ¿Tiene quejas sobre nuestra reverenda madre?

624. Solo sé que...

625. que...

626. ¿Qué sabe, hermana?

627. Benedetta nos engaña.

628. Se infligió ella misma las marcas en la frente.

629. Cuando se cayó, rompió un vidrio y se lastimó con él.

630. La vi.

631. Christina, querida hermana. ¿Qué está diciendo?

632. Y estoy segura que los otros signos aparecieron de la misma manera.

633. Hermana Christina.

634. ¿Vio a nuestra reverenda madre cortarse con un vidrio?

635. - ¿Está diciendo eso? - Sí.

636. Y se lo dije a la abadesa.

637. ¿Qué le dijo?

638. Lo que vi.

639. Lo que hizo la hermana Benedetta.

640. ¿Es consciente que un falso testimonio es un pecado mortal?

641. Yo no miento.

642. Hermana Felicita.

643. Adelántese.

644. ¿La hermana Christina le dijo que vio a la hermana Benedetta

645. infligirse heridas en la frente?

646. Tenía serias dudas.

647. ¿Pero la vio hacerlo?

648. No me dijo que asistió directamente...

649. ¡Directamente! ¿Asistió o no?

650. No.

651. No asistió.

652. ¡Mintió!

653. ¡No cree en mí!

654. ¡Es Satán que la está poseyendo!

655. ¡Hay que castigarla!

656. La flagelación. ¡Tiene que flagelarse!

657. ¡El diablo debe ser expulsado de su cuerpo!

658. ¡Desnúdese!

659. Libérese del demonio.

660. Azótese, querida hermana.

661. Por fin.

662. La lluvia se detuvo.

663. Tengo un regalo para ti.

664. Llegará más adentro que mis dedos. ¿Quieres probarlo?

665. Está un poco rugoso aquí.

666. Sí, ya me encargo.

667. Quítate esto.

668. - ¿Te produjo placer, verdad? - ¿Qué me produjo placer?

669. Ver a Christina azotarse. Te vi.

670. No es cierto.

671. Fue después.

672. Pensé en ti.

673. Como sería contigo.

674. ¿Probamos?

675. Bien liso.

676. ¿Te dolió?

677. No, me da placer.

678. ¿Hay un incendio?

679. - ¿Es una estrella? - Un cometa.

680. El cometa está sobre el convento.

681. - ¿Qué significa? - Es una advertencia de Dios.

682. Algo terrible va a suceder.

683. ¡No, Christina!

684. ¡No, no!

685. ¡Christina!

686. ¿Qué has hecho?

687. ¿Qué has hecho?

688. ¿Pequeña tonta, qué has hecho?

689. Le voy a imponer las manos e interceder por la salvación de su alma.

690. ¿Interceder? ¡No la toque!

691. Es necesario.

692. El alma de un suicida va al infierno, pero yo puedo intervenir.

693. ¡Quite sus manos! ¡Aléjese de ella!

694. Una palabra mía y Jesús la salvará de las llamas.

695. ¡Tú arderás en el infierno!

696. ¡No sigan!

697. ¡Sucia mentirosa! ¡Puta!

698. Me lo ordenó.

699. Sé que no es más nuestra abadesa pero...

700. ¿Adónde fue?

701. A Florencia.

702. La hermana Felicita salió.

703. Va a Florencia.

704. ¿A qué va?

705. Supongo que para hablar con el nuncio.

706. ¿Qué le va a decir?

707. ¿Qué es lo que temes que le diga?

708. Todo.

709. ¿Es decir?

710. ¿Qué mis milagros no son ciertos?

711. No estoy hablando de eso.

712. Que...

713. ¿Qué yo misma me corté con un trozo de vidrio?

714. Fue lo que hiciste, ¿no?

715. ¿No es cierto?

716. No lo sé.

717. No sé como Dios hace las cosas.

718. Solo sé que cumplió su voluntad a través mío.

719. No solo es mi carne.

720. Es la suya también.

721. ¡No sigas! ¡Me das asco!

722. ¿Es eso lo que te da miedo?

723. ¿Lo que la hermana Felicita pueda contar sobre nosotras?

724. Lo que hacemos.

725. ¿Crees que deberíamos avergonzarnos?

726. La vergüenza no existe bajo la protección del amor de Dios.

727. ¿El amor de Dios?

728. Solo te amas a ti misma.

729. - Acércate, entonces. - No.

730. Solo tus senos.

731. Por favor.

732. ¡Dulce Jesús!

733. ¡No me pidas eso, por favor!

734. ¿Benedetta?

735. Tus hermanas tienen que cavar una tumba.

736. ¿Dónde está Teresa?

737. En el hospital. No va sobrevivir, su Excelencia.

738. Probablemente no.

739. Ya van tres desde el domingo. Pero no tengo miedo.

740. Quizás sea porque estás llena de vida.

741. Unas pocas semanas y estará aquí.

742. Ya tengo leche.

743. Suficiente.

744. ¿Algo más que quiera agregar?

745. Le dije todo. Queda en sus manos.

746. Acusaciones extraordinarias exigen pruebas extraordinarias.

747. Solo dije la verdad.

748. Puede dudar de mis motivaciones pero venga a Pescia

749. y lo comprobará usted mismo.

750. Si su mirada es honesta.

751. Si hay diablerías en Pescia sabré como desenmascararlas.

752. Y si esa hermana es culpable de la blasfemia de la cual la acusa

753. irá a la hoguera.

754. Pero si su testimonio es falso...

755. ¿qué haremos con usted? ¿Quién puede decirlo?

756. Ah, sí.

757. Yo.

758. Nuestro Señor

759. Jesús.

760. Kyrie.

761. ¡Jesús,

762. ten piedad de nosotros!

763. ¡Es un signo del juicio de Dios!

764. "El tercer ángel tocó la trompeta

765. y cayó del cielo una gran estrella ardiente como un antorcha."

766. "Su pestilencia envenenará la tercera parte de las aguas."

767. ¡Es la peste! ! Es el instrumento para castigarnos!

768. ¡La peste caerá sobre Pescia!

769. Gracias Señor.

770. ¡Gracias!

771. No teman.

772. El cometa es el signo de que el Señor nos protege.

773. ¡La peste no tocará Pescia!

774. ¡Jesús me lo prometió, a mí su esposa

775. ¡que esta ciudad será perdonada!

776. ¡Señor Jesús, protégenos! ¡Protege esta ciudad!

777. ¡Gracias Señor Jesús!

778. Dulce Jesús,

779. sabemos que estás con nosotros.

780. Gracias, Dios mío.

781. Cierren las puertas de la ciudad. No permitan que nadie las cruce.

782. Es la voluntad del Señor. Cierren las puertas de inmediato.

783. ¿Hermana?

784. ¿Qué le pasa?

785. ¡Benedetta!

786. ¡Benedetta!

787. ¿La tumba es para ti?

788. ¡Contéstame!

789. ¡Una carta! ¡Cayó del cielo! ¡El final está próximo!

790. ¡Qué doblen las campanas!

791. ¡Está escrito! ¡Léala!

792. ¡Es una carta de Dios!

793. Nuncio.

794. Absuélvame.

795. Su Excelencia. Me estoy muriendo.

796. No me deje morir así.

797. ¡Vaya con el cura de su parroquia! ¡Pídale la absolución!

798. ¡Soy yo! ¡Yo soy el cura de la parroquia!

799. ¡Abran las puertas para el Nuncio!

800. ¡Las puertas quedarán cerradas!

801. ¡Nadie entra ni sale!

802. ¡Soy el nuncio de Florencia! ¡Abran estas puertas!

803. Aunque sea el Papa. ¡No se abrirán!

804. ¡Están bajo mi autoridad! ¡La autoridad de la Iglesia!

805. ¡Aquí estamos bajo la autoridad del mismo Jesús!

806. ¡Las puertas quedarán cerradas!

807. Excelencia.

808. Soy el preboste de Pescia.

809. Soy Alfonso Giglioli, representante del Papa.

810. Tengo que hablar con la abadesa del convento de las Teatinas.

811. Lamento deber anunciarle que la Santa Benedetta murió esta tarde.

812. Lamentamos que haya hecho este viaje.

813. Celebraré la misa funeraria con usted. Condúzcame donde está.

814. Adelante.

815. La peste debe quedar fuera de nuestros muros.

816. Quien entre debe ser examinado por nuestros médicos.

817. Aún usted, Excelencia.

818. ¡Dios nos envía! ¡Usted no nos va a detener!

819. ¡Entramos!

820. ¡Abran paso! ¡Circulen!

821. ¡Apártense!

822. ¡Abran!

823. Es un honor recibir a su Excelencia.

824. ¿Eligió justo este día para realizar un espectáculo?

825. No Excelencia. Antes de morir nuestra madre nos reveló

826. como Dios quería que fuera celebrada su ascensión al Cielo.

827. - ¿Otra de sus visiones? - Exactamente, Excelencia.

828. Su ataúd debía ser llevado por nueve novicias vestidas como ángeles.

829. Su piel está intacta. Sin signos de la peste.

830. - ¿Recibió los últimos sacramentos? - No, Excelencia, su deceso fue súbito.

831. Se los voy a administrar. Hagan los preparativos.

832. ¿Está contenta?

833. Nunca deseé que muriera.

834. Por lo menos no tan rápido.

835. "Per istam sanctan unctionem...

836. ¡Retenme Jesús!

837. ¡No permitas que me vaya!

838. Quiero quedarme contigo.

839. Estaba en el Cielo en una paz perfecta.

840. Pero fui arrancada

841. como un bebé del vientre de su madre. Me reenviaron.

842. Jesús me trajo de nuevo a la Tierra.

843. ¿Por qué razón, madre?

844. Vi las almas de los que pronto van a morir.

845. Vi todos sus almas, lloré torrentes de lágrimas.

846. Vio la mía también, supongo.

847. Jesús me envió para...

848. salvarlo de la peste y de lo que le espera después:

849. Las llamas eternas del infierno.

850. No se preocupe demasiado de las llamas del Infierno, madre.

851. Son las llamas de este mundo que van a consumirla.

852. La muerte negra se acerca de Pescia.

853. Acecha en las puertas de la ciudad, afilando su guadaña.

854. Vi los cuerpos hinchados, vi la sangre. Ricos y pobres,

855. mujeres y niños.

856. Jesús también estaba ahí.

857. Me prometió que mientras viva ustedes también vivirán.

858. Está acusada de blasfemia, herejía y de bestialidad.

859. Su juicio comenzará mañana.

860. No encontramos nada, Excelencia.

861. ¿Inspeccionaron todo? Destriparon colchones, almohadas?

862. Sí, Excelencia. Nada.

863. Es así de grande.

864. Debe estar en algún parte. Sigan buscando.

865. - ¿Qué les vas a decir? - La verdad, por supuesto.

866. Puedes también decirles otra cosa.

867. Novicia Bartolomea, póngase de pie.

868. ¡Póngase de pie!

869. Bien.

870. Hermana Felicita, díganos lo que vio.

871. No tengo palabras para describir esos actos.

872. Inténtelo.

873. Vi a esta chica en abrazos carnales

874. con la madre superiora Benedetta.

875. ¿Puede ser más precisa, hermana?

876. Se servían una a la otra,

877. cada una en su turno,

878. como un hombre con una mujer.

879. ¿Cómo fue testigo de esos actos?

880. Por una mirilla que yo misma perforé en mi ex habitación.

881. ¿No es un pecado mortal espiar a la madre superiora?

882. No juzgamos hoy la conducta de la abadesa anterior.

883. Deberíamos. ¿Cómo podemos saber si las declaraciones de esta mujer

884. no son dictadas por celos o despecho?

885. El testimonio de la hermana Felicita es un principio no el fin.

886. Bartolomea.

887. ¿Qué responde a la acusación de la hermana Felicita?

888. Diga la verdad

889. - No entiendo lo que dice. - ¿Perdón?

890. No entiendo lo que está diciendo.

891. ¿Miró a la abadesa Benedetta con lujuria?

892. ¿Lujuria entre dos mujeres? Es imposible.

893. Parece que en este convento se agrandó el horizonte de la posible.

894. Bartolomea.

895. ¿Miró a la abadesa Benedetta con lujuria?

896. Con amor.

897. Lo que siento por la hermana Benedetta es amor.

898. El mismo que siento por todas mis hermanas.

899. Pero no expresó ese amor a sus otras hermanas

900. de la misma manera, ¿no es cierto?

901. ¡No!

902. Hermana Felicita.

903. ¿Con qué medios, la novicia Bartolomea,

904. expresó su amor por la madre superiora?

905. Usó una estatuilla de madera, de la Santa Virgen,

906. para penetrar el sexo de Benedetta y hacerla gozar.

907. Crimen Nefastum.

908. Es una inversión sacrílega del orden natural.

909. Una abominación que merece el castigo supremo:

910. La hoguera.

911. No es cierto... no es cierto.

912. Todavía está a tiempo de salvar su alma, hija mía,

913. si confiesa.

914. No tengo nada que confesar, Excelencia.

915. ¿Si sabe lo que sucedió por qué quiere que lo confiese?

916. Tu confesión atenuará tu pecado.

917. Todavía puedes evitar la hoguera y Benedetta también.

918. ¡No!

919. Desvístanla.

920. ¡No!

921. Puedes salvar tu alma si hablas.

922. Está bien.

923. Confieso.

924. Tuve pensamientos horribles.

925. Odio a la hermana Juliana. Quise que se muriera.

926. ¡Suéltenme, ahora!

927. Hija mía.

928. No es eso lo que queremos oír.

929. La pera de angustia.

930. ¿Ya has visto algo igual?

931. Juana de Arco era una guerrera valiente,

932. hasta sus enemigos lo reconocían.

933. Sin embargo...

934. confesó todos sus pecados cuando le mostraron los instrumentos de tortura.

935. Es inútil que pretendas ser más valiente que Juana de Arco.

936. Es inútil que pretendas lo que sea.

937. Ya confesé.

938. Le dije que quería matar a la hermana Juliana.

939. Soy culpable de homicidio.

940. Tenga piedad.

941. ¡Confesé!

942. Todavía no nos conocemos, pero estamos en el mismo barco.

943. El viaje puede ser largo o puede ser corto.

944. Roguemos a Dios que aclare nuestro camino.

945. ¡No, no, no, no!

946. Entren.

947. ¿Qué es el amor, según usted?

948. Creo que...

949. el amor es no sentirse solo.

950. Es... un calor aquí.

951. ¿Le duelen los pies?

952. Es abadesa y me quiere lavar los pies.

953. Cuando era novicia lavé muchos más.

954. ¿Nunca tocó a un hombre?

955. - No. - ¿Por qué?

956. Porque es insensible a los deseos naturales de una mujer.

957. Solo tengo deseos para Dios.

958. Intenta seducirme, ¿no?

959. ¿Dónde aprendió esos talentos de puta?

960. Sé muy poco sobre los talentos de puta.

961. Y no le voy a preguntar cómo es que sabe algo.

962. Jugar conmigo es jugar con fuego.

963. Literalmente.

964. No tengo miedo.

965. Claro,

966. avanza revestida con la armadura de la luz.

967. El amor es la única armadura que necesito.

968. ¿El amor de Cristo, quiere decir?

969. ¿O el amor de Bartolomea?

970. El de Bartolomea también.

971. ¿Jesús tiene que compartir?

972. Comparte todo con alegría. Con toda la humanidad.

973. Ese calor del que hablaba aquí,

974. no era el amor para toda la humanidad.

975. Era algo particular, ¿no es cierto?

976. Bartolomea es lo particular.

977. Y a través de ella alcanzo el amor universal.

978. ¿A veces lo universal le llega a través de un trozo de madera?

979. ¡No te me acerques!

980. Bartolomea...

981. Les dije que me engañaste.

982. Que me obligaste a pecar.

983. Pusieron mentiras en tu boca.

984. ¡No quiero sufrir más por ti!

985. ¡Vete al infierno!

986. ¿Está dispuesta a confesar?

987. Aquí está la prueba que buscan.

988. Aquí está su amor, Benedetta.

989. ¡Blasfemia!

990. ¡Blasfemia!

991. ¡Se burla!

992. ¡Se burla de mi esposa como se burlaron de mí en la cruz!

993. ¡Sacrilegio!

994. ¡Todos han sido juzgados!

995. ¡Tú, Alfonso Giglioli, haz sido juzgado!

996. ¡Pagarás tu blasfemia con sangre y pus negro de las bubas!

997. - ¿Cuándo apareció? - Hace una hora.

998. No diga nada.

999. Póngala en el sótano con guardia. Nadie debe entrar o salir.

1000. Y quemen todo lo que tocó.

1001. Mantén la frente en alto.

1002. Aprendí algo cuando me prostituía.

1003. La humillación no deja marcas.

1004. ¡Al ladrón! ¡Agárrenla!

1005. ¡Agárrenla!

1006. El pueblo de Pescia no permitirá que quemen a la que los salvó de la peste.

1007. El pueblo no decide, es la iglesia que decide y ya decidió. Firme.

1008. Nuncio, fue prometida a Dios desde su infancia.

1009. Padre, su tarea ya terminó.

1010. Siento piedad y amor por Benedetta.

1011. Pero la piedad y el amor no tienen nada que ver con el deber.

1012. La sentencia es irrevocable.

1013. Excelencia.

1014. ¿Sí?

1015. Nuestra hermana Benedetta tiene un petición.

1016. Pide autorización para rezar con la hermana Felicita

1017. e implorarle su perdón.

1018. Quisiera también...

1019. ser llevada a la plaza sobre un asno, como Cristo entró a Jerusalén.

1020. Por el asno no, por supuesto.

1021. Pero la autorizo a montar su comedia con la hermana Felicita.

1022. Después de todo, todos tenemos que actuar en nuestro rol hasta el final.

1023. Está bien.

1024. Puedes irte.

1025. ¿Estás contenta de que me esté muriendo?

1026. Vengo a decirle lo que Jesús me reveló.

1027. Su hija está esperando que se reúna con ellos.

1028. No creo una palabra.

1029. Pero no está en el Infierno, por lo menos.

1030. Dio su vida a Dios sin creer en él.

1031. Ahora debería ser su consuelo y su salvación.

1032. Pero está sola frente al terror de la muerte.

1033. Dios nunca me habló como le habla a usted.

1034. Le está hablando en este momento.

1035. Le habla a través de su dolor.

1036. Entonces me habla mucho.

1037. Pero no entiendo nada sobre lo que me quiere decir.

1038. ¿Qué es?

1039. ¿Qué le está diciendo?

1040. ¿Cree que lo sé?

1041. Quizás sí.

1042. Sí, lo sabe.

1043. Sí.

1044. Dígamelo.

1045. Dígamelo.

1046. Dígamelo.

1047. ¡Benedetta!

1048. ¡Benedetta! ¡Benedetta!

1049. ¡Perdóname!

1050. ¡Benedetta!

1051. ¡Benedetta! ¡Mírame!

1052. ¡Perdóname, por favor!

1053. Dime que no me odias.

1054. Está bien, era necesario que fuera traicionada.

1055. ¡Muerte al Nuncio!

1056. ¡Libérenla!

1057. ¡Déjame!

1058. Te otorgo la misericordia del estrangulamiento.

1059. Así no sufrirás con las llamas.

1060. Pero debes confesar todo.

1061. ¡Renuncia a tu vanidad!

1062. ¡Confiesa!

1063. Voy a confesar.

1064. Habla.

1065. Desgraciada ciudad de Pescia.

1066. No pude salvarte.

1067. No pude hacerte renunciar al mal.

1068. ¡Traicionaron a mi amor!

1069. ¡Ninguno de ustedes será perdonado!

1070. ¡La muerte recorrerá esta ciudad

1071. como un viento que arrasa todo al pasar!

1072. ¡Vean!

1073. ¡El Ángel de la muerte extendió sus manos!

1074. ¡La muerte está aquí!

1075. ¡Ya está caminando entre ustedes!

1076. ¡Ángel de la muerte!

1077. ¡Muestra tu cara!

1078. ¡Él me hizo esto!

1079. ¡El Nuncio!

1080. ¡Él trajo la peste a Pescia!

1081. ¡Sobre ustedes!

1082. ¡Sobre vuestros hijos!

1083. ¡Basta!

1084. ¡A la hoguera!

1085. ¡Llévenla a la hoguera!

1086. - ¡A la hoguera! - ¡No!

1087. ¡No!

1088. ¡Si muere estaremos todos malditos!

1089. ¡Fue el Nuncio! ¡Fue el Nuncio que trajo la muerte!

1090. ¡Es al Nuncio que hay que quemar!

1091. ¡A muerte!

1092. ¡Hay que desatarla!

1093. ¡Huyan!

1094. ¡Toma el beso de la paz!

1095. ¡Atrápenlo!

1096. ¡Benedetta!

1097. ¡Benedetta!

1098. ¿Quieres que ruegue por la salvación de tu alma?

1099. ¿Cuándo estuviste muerta, has visto el otro mundo?

1100. Jesús me mostró el lugar de cada alma,

1101. pasado, presente y futuro.

1102. ¿Y yo, estaba en el Paraíso o en el Infierno?

1103. En el Paraíso.

1104. Hasta el final, seguirás mintiendo.

1105. ¿Qué haces?

1106. Tengo que regresar allá.

1107. Allá no hay más nada.

1108. ¿Por qué regresarías?

1109. El convento es mi casa. Juré pasar toda mi vida en él.

1110. Es pasado.

1111. No para mí.

1112. Podemos ir donde queremos.

1113. - ¿Lo crees así? - Sí, a cualquier parte,

1114. Roma, Venecia, España...

1115. ¿Cómo comeríamos?

1116. ¿Robaríamos? ¿Nos venderíamos?

1117. Hay cosas peores. Pero al menos estarías viva.

1118. Si regresas no demorarán en llevarte a la hoguera.

1119. No me quemarán.

1120. Estoy protegida.

1121. ¿Por quién? ¿Por tu esposo, Jesús?

1122. ¿Sigues sin creer en mí? ¿Después de todo lo que viste?

1123. Mira.

1124. Ya te expliqué cómo es.

1125. ¡No hay nadie aquí!

1126. Estamos solas. Puedes contarme lo de los estigmas. Dímelo.

1127. Dímelo.

1128. Si me quieres, dímelo.

1129. ¡Dímelo!

1130. ¿Por qué me haces hacer cosas tan horribles?

1131. Porque no quiero que mueras.

1132. La gente que ayer te apoyaba será la que te lanzará al fuego.

1133. Tienes razón.

1134. Me atarán a la hoguera.

1135. La encenderán.

1136. Las llamas me lamerán pero no me quemarán.

1137. Dios no lo permitirá.

1138. Y todos lo verán.

1139. Nadie podrá nunca más dudar. Tú también.

1140. No dudarás más y no temerás más.

1141. Será mi regalo para ti.

1142. Estás loca.

1143. No eres más que una niña, Bartolomea.

1144. Es parte de tu encanto.

1145. ¡Vete!

1146. ¡Vete entonces!

1147. ¡Vete al Infierno!

1148. ¡Que te quemen!

1149. ¡Vete!

1150. El martirio le fue negado a Benedetta Carlini.

1151. Vivió hasta los setenta años enclaustrada en el convento.

1152. Podía asistir a misa y en ocasiones cenar con sus hermanas pero sentada en el suelo.

1153. La peste que arrasó el país perdonó completamente a la ciudad de Pescia.